Juan debe enfrentarse a una lucha desigual con la naturaleza, con los desafíos del mar y también con un grupo de delincuentes que pretende apoderarse de valiosos objetos que transporta el velero.
El autor, basado en su inquietud por compartir experiencias con futuros navegantes, presenta historias ficticias pero siempre vinculadas a la realidad, en las que cuenta los sinsabores y los beneficios de vivir embarcado.
Pasar de un puerto a otro, navegar en un carguero o en un buque de pasajeros, adaptarse a las condiciones a cada paso, compartir la vida con personas de las más variadas nacionalidades, la soledad, el aprendizaje constante… son algunos de los aspectos inevitables por los que atraviesan los navegantes.
Esta es una agradable novela para amantes de los barcos y los mares, dispuesta a conquistar también a otros lectores.
